La ética valora la moral de cada ser humano. Y en
las profesiones existe el plus de cómo crea una verticalidad entre su
cotidianidad personal y la recurrencia de su oficio.
Regirse por normas y principios morales que no sean
en extremo rígidos que aparten, ni flexibles que puedan ser manipulados, logra
sembrar confianza en las personas, ya que quien trabaja de la mano con la
ética, se dedica a ofrecer calidad, responsabilidad y todo aquello que
beneficie a su contraparte, tanto como a quien la profesa.
Un vendedor tiene el deber ser de demostrarse ético
por antonomasia. Y el que no lo es, termina dando pérdidas tal cual se las
gana. Recuerden que al estafador, siempre se le devuelve todo.
Y no importa el medio que el vendedor utilice para
mostrar sus productos. La ética no varía, sino que más bien, debe amoldarse
para acrecentarse.
Sí colocamos como ejemplo a cada vendedor que hace
vida en el portal web de ventas online https://vendocanarias.es nos podremos dar
cuenta que la ética se apega no solo a las normativas establecidas por el
portal para ofrecer una gran experiencia al usuario. Se fundamenta en la
fiabilidad y compromiso de cada persona que muestra sus bienes, productos y
servicios en él.
Y decimos que se acrecienta porque hay que convencer
con hechos que el producto que se expone es de fiar, tanto en su carácter
(nuevo o usado), su estado (optimas, medianas o bajas condiciones), que el
envío será gratuito o no, pero se realizará acorde a lo pautado; que sí se
piden varias piezas, todas llegarán cumpliendo los estándares establecidos en
la transacción y que el precio no tendrá alteraciones por letras ocultas.
La ética del vendedor es dar lo correcto, por lo que
les han pagado. Y cumplir con las garantías por defectos, por falta de interés
o por no corresponder a lo que se ha solicitado, entre otras.
Cada cobro es un compromiso entre ambas partes,
siendo la del vendedor la mayor, no sólo por la ética y mística que tiene hacia
su negocio como micro emprendedor o mediano o gran comerciantes, sino porque
las leyes así se lo exigen.
Al vendedor virtual también se le puede enjuiciar o
bloquear su IP, dando pérdidas y siendo “expuesto o rayado” ante la comunidad
virtual, dificultándole las ventas, solicitud de créditos o que se le dé
material a buenos precios o a consignación por parte de fabricantes y
distribuidores.
La ética en la Internet es igual que la que se hace
en una tienda física. Porque así como puede elevar las ventas, puede brindar
pérdidas económicas, sociales e incluso, de la libertad, ante un juicio que se
habrá ganado por creerse intocable y jugar con la buena fe de los clientes y/o
proveedores.
Ahora que las ventas online predominan, gracias a
poder traspasar las barreras geográficas y que además, portales como vendocanarias.es permiten la subida de
gran cantidad de productos y exponerlos ante infinidad de públicos con
intereses por ellos, la ética se debe demostrar no sólo para vender, sino para
que la gente sepa quién eres en realidad y trasciendas al momento, tanto en una
tienda física como virtual.
Recuerda que todo este trabajo, es parte de tu
desarrollo sociocultural y mientras más ético y responsable te portes, crecerás
como persona como a la par, creces como un comerciante próspero, así tengas el
más pequeño y humilde de los negocios, tu buena actitud, moral y luces, te harán ser grande.
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