Ya
de por sí el manga es una demostración de la cultura japonesa, tanto de
su visión integral del mundo en la ficción a manera de abrir espacios de
interacción que bien han calado en Occidente desde los años 60 del siglo XX.
Tanto
el honor, la educación, virtudes y la polisemia de la palabra se encuentran
unidas en imágenes y textos poderosos que hurgan de manera adecuada sobre las
energías, talentos y cruces existenciales de la raza humana, incluso cuando sea
expuesta por seres antropomórficos, alienígenas humanoides, deidades o máquinas
que se transforman en extensiones del pensar y sentir de sus ocupantes.
Las
aventuras, sinsabores, desparpajos, displicencias, enfoques unilaterales o de
gloria, son tocados magistralmente en el manga y es por ello que, -en este lado
del planeta- haya más de una tienda de mangas en Colombia, Panamá, México, España, Francia,
Portugal, Argentina, Chile e incluso Estados Unidos, exhibiendo colecciones
completas de los títulos más o menos demandados en el mundo, que han cautivado
a hombres y mujeres de cualquier edad, por igual, al ser una amasijo de
sentimientos, acciones y posibilidades únicas.
Sobre los elementos culturales japoneses en el manga
El
respeto, amor, y patriotismo se presenta en cualquier colección de mangas, ya
que la misma cultura japonesa se encuentra atada al honor, la dignidad, el
misticismo y un muy bien hilvanado uso de la lógica.
Por
ello y con el mayor de los gustos, los mayores escritores de manga han incluido
de manera sutil pero muy palpable diversos elementos culturales japoneses que
aparecen de forma recurrente en sus creaciones, cuya sola presencia o explicación
en los diálogos conecta de manera real a cada tradición, simbolismo y narrativa
visual del país nipón.
Entre
los más recurrentes elementos de la cultura japonesa que contemplamos en el
manga, tenemos:
Yūrei
(fantasmas japoneses), que son los espíritus vengativos o
errantes con cabello largo y blanco, ropa funeraria y una presencia
melancólica. Aparecen en mangas de horror, misterio o romance sobrenatural.
Oni
(demonios tradicionales), criaturas con cuernos, piel roja o
azul, y fuerza brutal que representan el mal, pero también aparecen como
protectores o figuras cómicas en mangas de acción y comedia.
Shintoísmo
y Kami (deidades), descritas en los templos, rituales, y
espíritus de la naturaleza son comunes. Los mangas suelen mostrar interacciones
con kami, como en Noragami o Spirited Away.
Festival
del Obon, recurrente su uso en el manga como en el animé esta
celebración para honrar a los ancestros. Se representa con linternas flotantes,
yukatas y bailes tradicionales, evocando nostalgia y conexión espiritual.
Mochi
y comida tradicional como el famoso ramen (sopa ramen),
onigiri y bento, que aparecen constantemente como fondo cultural y como parte
de los momentos íntimos o tragicómicos entre personajes.
Conejo
de la luna (Tsuki no Usagi) Basado en la leyenda del conejo que
vive en la luna haciendo mochi. Referenciado en Sailor Moon y Dragon Ball, simboliza
sacrificio y ternura.
Tatamis
y casas tradicionales, infaltables en cualquier publicación
de manga ya que son escenarios caseros, con sus puertas corredizas, futones y
jardines zen que reflejan la vida cotidiana japonesa y el contraste entre
tradición y modernidad.
Uniformes
escolares y vida estudiantil, esto es el vínculo en el
manga entre Oriente y Occidente, pero de manera silenciosa y en ocasiones,
excitante. El sistema educativo japonés, con clubes, exámenes y jerarquías
sociales, es un pilar narrativo en géneros como shōjo, shōnen y slice of
life.
Hanami
(contemplación de flores de cerezo), para los momentos más
románticos o recuerdos, las escenas bajo los cerezos en flor simbolizan nuevos
comienzos, belleza efímera y momentos románticos o introspectivos.
Kimonos
y Yukatas la vestimenta tradicional usada en festivales,
ceremonias o momentos especiales. En el manga, suelen marcar transiciones
emocionales o culturales.
Dojo
y artes marciales, se vinculan con frecuencia en el manga de
vidas reales o enfocados en artes marciales o nobleza, al ser los espacios de
entrenamiento donde se enseñan valores como disciplina, respeto y superación.
Son comunes en mangas de acción y deportes.
Ukiyo-e
y estética visual es -aunque no se perciba sin saber del
detalle- la influencia del arte tradicional japonés en el estilo gráfico del
manga, especialmente en fondos, patrones y composición.
Onsen
(baños termales), sea para el bien o para el mal, ya es una
especie de cliché el uso de estos escenarios recurrentes para relajación,
comedia o desarrollo de personajes, ya que estos lugares en Japón representan
purificación física y emocional.

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