Luego de analizar una importante revista salud que conseguimos vía online, quedamos claros que la música y salud son ambas necesarias, tanto para el cuidado como por los riesgos. Para ello decantamos algunos aspectos en el ambiente público como privado.
Datos de interés
La música y salud han sido compañeras desde siempre. Si bien
la música es una cura para el alma,
algunos instrumentos, en especial los de viento, pueden causar lesiones en garganta,
vías respiratorias y la salud bucal integral.
Por ende, quienes tocan instrumentos como trompeta, clarinete, flauta, tuba, oboe,
fagot, saxo han de estar en extensa revisión de los ítems nombrados. Por igual
para el instrumento más difícil que existe, la voz, es necesaria una revisión integral de preferencia anual.
Quienes ejecutan instrumentos de cuerdas como arpa, violín, viola, guitarra, charango,
cuatro, bien que requieren cuidar sus manos y observar cualquier síntoma
que pueda conducir a artritis o lesiones en las falanges. Por igual problemas
dérmicos.
Para todos los músicos, factores como vista y oído son
ineludibles en su constante revisión. No son caprichos ni situaciones a eludir,
quienes desean llevar al arte de los
sonidos por el tránsito completo de su vida, han de estar en constante
supervisión médica. Música y salud son una misma cosa, para el ejecutante.
Música y Salud en el sector público y privado
Aquí nos vamos más a la exposición musical. Hay muchos
buenos Dee Jay (Disc Jockey o DJ) u
operadores de audio que por amenizar un ambiente, obvian las repercusiones que
tienen los altos decibeles a los que se exponen.
Muchos de ellos, gracias a la posición de las cornetas quedan en un silencio de nodo que les crea una especie de zona de confort que
refuerzan con el uso de audífonos. Este trabajo constante no sólo afecta a sus oídos,
sino también a su capacidad neuronal y equilibrio; incluso hemos podido leer en
la revista salud anteriormente citada y otras publicaciones que se ve afectado
el corazón y la muscularidad toda, esto debido a la gran carga de stress que
pueden generar los bajos, medios y
agudos modulados en las consolas de audio.
¿Qué hacer en pro de la música y salud?
La música y salud son una simbiosis necesaria. La ejecución
de los instrumentos o el canto ameritan revisiones cotidianas, ejercicios de
estiramiento, modulación bucal y ejercicios respiratorios.
El consumo de alcohol y el fumar han de ser de poco a
nada, según el grado de compromiso que se tenga con esta bella profesión como
lo es la música.
Utilizar tapones reguladores de oído, incluso los de
calidad industrial (utilizados en refinerías), es excelente para su cuidado
personal.
Consumo de vitaminas, lentes bajos prescripción facultativa,
tener espacios de calma y relajación en el hogar, trabajo y con los seres
queridos, aprovechando los momentos de silencio, ayuda a mantener un nivel
ideal para que el cuerpo no resienta el volumen
alto.
Música y salud se requieren porque ambas se permiten dar
bienestar a los demás. Incluso las letras que no insten a vivir falsedades
actitudinales, violencia ni caer en trivialidades, pueden considerarse música y
salud, porque hacen que los buenos sonidos cuiden la salud mental y por ende
espiritual del individuo, lo que le permite hacer crecer su gusto en muchos más
géneros y rescatará canciones de siempre, siendo respaldadas por mejores
canciones de ahora.
Y sanear al ámbito musical es una tarea de música y salud
que todos debemos afrontar o seguiremos hundiéndonos en ritmos y letras que no dan algo bueno qué decir de las mismas por lo poco sanas,
aunque ganen premios ¿?
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